Las cinco impresiones digitales presentadas por Íñigo Bilbao en Arenas Movedizas forman parte de su proyecto Memento Mori, en el que experimenta con el potencial creativo del hardware y el software médicos empleados en combinación con software de modelado y render 3D. Los datos obtenidos cuando un sujeto se somete a un TAC (Tomografía Axial Computarizada) o a una MRI (Magnetic Resonance Imaging) acostumbran a ser utilizados como medio de diagnóstico. Sin embargo, esos mismos datos resultan, en este caso, explotados por el autor con una finalidad artística. Parte de la labor es delegada a las máquinas, ellas obtienen una reproducción virtual, de calidad hiperrealista, de las piezas que sirven de modelo a cada obra. Las máquinas eliminan la distorsión impuesta por las limitaciones de percepción del autor y dejan su impronta en forma de píxeles, líneas de escaneado, cortes del láser, interferencias, etc., como si del grano de una fotografía se tratara. El autor ilumina, texturiza, encuadra y procesa las imágenes obtenidas, pero dicha impronta es respetada. Por otro lado, se buscan las composiciones más minimalistas posibles a fin de resaltar la frialdad y objetividad de la imagen biomédica. En definitiva, las herramientas médicas son empleadas de forma inusual: escaneando modelos sanos, mostrando errores e interferencias, dándoles un uso más allá del científico.

Iñigo Bilbao siempre ha estado interesado en las relaciones existentes entre el arte, la ciencia y la tecnología. En 2005 obtiene la subvención para artistas de Cajastur, hecho que le permite dar el salto a la escultura digital y comenzar sus proyectos más potentes. En 2007 comienza a experimentar con el uso de escáneres médicos en combinación con máquinas de prototipado. Su obra se ha expuesto en Barcelona (CCCB, Metronom, Convento de S. Agustín), Valencia (Museo de las Ciencias Principe Felipe), Gijón (Museo Barjola) y Sanghai (Island 6 Art Centre), y prepara su primera exposición individual, “Naturalezas Digitales”, que tendrá lugar en diciembre de 2007 en Gijón.

www.ibl3d.com

Ángeles Agrela presenta el vídeo Poder en el que investiga la relación entre el artista y el superhéroe. Ángeles se acerca a artistas y superhéroes para ironizar sobre “algunas de las cosas que nos identifican socialmente en un lugar común donde, en la versión más romántica, confluyen la excentricidad, la exclusión, la vida atormentada y la autodestrucción”. 
A partir de ahí, la capacidad que hace que uno sea héroe o artista viene dada por el destino. “En las historietas que más me interesan”, dice Ángeles, “los héroes tienen una vida normal bastante atormentada, tienen que trabajar para poder vivir, mantienen relaciones sentimentales casi imposibles y les gustaría poder comprometerse con todo eso. Sufren grandes crisis y, sin embargo, finalmente tienen que seguir su destino y usar su poder”. 
Igualito que un artista.

https://angelesagrela.wordpress.com/

En el vídeo la heroína enmascarada se muestra en pleno control de su capacidad y sus poderes en pleno vuelo, pasando luego por malos momentos y alumbrando finalmente el resultado de su creación, que es el resultado de su propio tránsito. Un viaje no muy distinto de lo que se puede llegar a sentir en su propia biografía. Esta obra es una continuación de un proyecto en el que la artista lleva trabajando desde hace más de tres años, relacionado con la personalización de los artistas y su papel dentro de la sociedad, con el de los superhéroes y su puesta en escena desde el punto de vista del cómic o el cine de acción.

Ángeles Agrela es una artista que trabaja de manera multidisciplinar con el tejido, el vídeo, la fotografía, la pintura, el dibujo y la obra gráfica. Sus proyectos tienen componentes narrativos esenciales y dan pie a líneas argumentales que describen historias. Su trabajo siempre ha estado muy relacionado con la identidad y el cuerpo.